regreso

hace casi exactos 14 años que tome una de las deciones mas trascedentales de mi vida....me fui de mi comodo hogar en una tranquila ciudad (al menos en ese tiempo lo era) 540 kilometros al norte, a la capital.....no quiero poner el caso de un drama, jamas lo ha sido y nisiquiera quiero que se lo imaginen, fue raro, dificil, triste pero es el camino que decidi.....tenia 18 años habia salido del colegio y por aquellos años de P.A.A mi destino me indicaba en teoria 2 opciones o me matriculaba en la aun mas sureña Puerto Montt o me quedaba haciendo un preu (cosa que no habia hecho ese año) y daba la prueba para quedar en Conce, la verdad que ninguna de las alternativas me convencian, pero sabia que si seguia con mis intenciones de ir a Puerto Montt lograria de una u otra manera salir de casa y hacer mi propio espacio, la verdad para ser honesto si uno lo veia de afuera no tenia motivos para irme, pero por aquellos años sentia que era necesario para mi desarrollar todo mi potencial, necesitaba saber hasta donde podia llegar, me veia en la urgencia de encontrar mi propio camino, lejos del alero familiar, pensando estupidamente que siempre estaria mi casa para volver.......finalmente se dio la posibilidad de llegar a Santiago pero obviamente nada es gratis, a fuego quedaron grabadas la unica condicion de mi padre..."te vas, pero no te devuelves sino terminas tu carrera"...eso significaba una especie de exilio, no habia vuelta atras, se me negaba la posibilidad del fracaso y del arrepentimiento.....hoy viendo con la perspectiva de los años me parece que era una mochila un poco pesada para una persona que recien salia del colegio, pero si algo se nos enseño a los Henríquez Véjar fue un valor supremo el de la responsabilidad, desde chicos se nos inculculco ese valor y por tanto para bien o para mal todos nuestros actos estan determinados por este valor.
mentiria si dijiera que todo fue facil y simple, no lo fue, pero era mi decision y mi familia solo esperaba el resultado final.....
al estar aca me permitio tener un monton de libertades, me acostumbre rapidamente a esta ciudad, me adapte, literalmente vague por sus calles, me sentia comodo, pero el no estar en el sur me significo mi mayor dolor, mi mayor frustracion, mi mayor pena, no estuve ni fisica ni emocionalmente al lado de mi madre cuando fallecio la suya, jamas la apoye en su dolor y no sabia que un año despues ese dolor me golpearia mi, el no haber disfrutado de mi madre, el no haber estado junto a ella cuando cayo enferma, es mi cruz, mi karma, pero no podia volver, la responsabilidad me obligaba a terminar, la vida da vueltas y llego mi hijo, a los años mi hija y son ellos el motivo por el que regreso, la vida en la metropoli es para los adultos, con sus peligros, sus largas distancias, su agresividad, una ciudad que te obliga a ser adulto desde muy niño, una ciudad que no te respeta y lo unico que ofrece son ilusiones de bienestar, ya lo comprobamos con el parentesis de viña, mentalmente cualquier lugar es mejor que la capital....regreso a mi tierra, claro no vuelvo solo , vuelvo ha cerrar los circulos, a recuperar tiempo con los que se quedaron y a devolverle un poco de inocencia a mis hermosos bebes, hasta cuando eso no lo se solo se pero siento que ya es tiempo de regresar.